
La Mesa de Enlace se expresó en contra sobre la reorganización del INTA.
El organismo del cual participa Coninagro se mostró en contra de un proyecto presentado por la dirigencia política para reorganizar el Consejo Directivo del INTA.
Luego del conflicto por las exportaciones de la carne vacuna, se abrió un nuevo capítulo en la disputa entre el sector agrícola y el Gobierno Nacional, en esta ocasión a partir de un proyecto presentado por Diputados.
Se trata de una iniciativa del oficialismo por quitar representación agropecuaria del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), que implica una organización del sistema y de su Consejo Directivo.
A partir de esta iniciativa el sector agrícola por intermedio de la Mesa de Enlace, organismo del cual participa Coninagro en representación del movimiento cooperativo, se mostró en contra y realizó un comunicado en cual expresó su profundo rechazo.
“Hace unas semanas, nosotros mismos rechazamos proyectos de ley que pretendían apropiarse de tierras de las estaciones experimentales en distintas provincias. El organismo tiene un rol fundamental en el desarrollo tecnológico del sector y funciona a lo largo y ancho del país. Primero fueron por las tierras, ahora por la conducción”, comentaron desde la Mesa de Enlace.
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“¿Qué queda para mañana? Frente a este nuevo intento por avasallar al INTA, solicitamos a los diputados y senadores que no permitan que se vulneren los derechos de las entidades que representamos a los productores agropecuarios”, agregaron desde la institución.
“Con esta iniciativa de las diputadas Mabel Caparrós y Alcira Figueroa se pretende transformar el Consejo Directivo en un órgano totalmente político, con ocho miembros de ese ámbito, desplazando a las entidades rurales y académicas que hoy forman parte de las decisiones, quienes pasarían a ser meros asesores”.
“No hay argumentos válidos para desmantelar el INTA, toda vez que se trata de una institución de reconocida capacidad y prestigio. Lo único que parece animar este cambio es una notable carga ideológica y la necesidad del núcleo duro del kirchnerismo de apoderarse de una jugosa caja”.